A Solas Con Dios Edicion Bolsillo - John Macarthur

Precio especial $4.49 Precio regular $5.99 Su Ahorro: $1.50 (25%)
Añadir a la Lista de Deseos

A solas con Dios, debería ser el mayor anhelo de todo cristiano. Sin embargo, muchos de nosotros pasamos muy poco tiempo con él. El autor examina profundamente cada petición del Padrenuestro y nos propone considerar que "la oración es como la respiración" a la que debemos prestar urgente atención. Al estudiar este libro saldremos vigorizados y motivados a pasar más tiempo a solas con Dios.

Qué podemos aprender del Padrenuestro? Todo lo que necesitamos está a nuestra disposición. Primero debemos dar a Dios el lugar que se merece. Luego podemos traerle nuestras necesidades, y él las suplirá por medio de su abastecimiento ilimitado y eterno. Un autor desconocido resume muy bien el impacto de este modelo de oración:

No puedo decir "nuestro" si vivo solamente para mí mismo en un compartimiento espiritual hermético.
No puedo decir "Padre" si no me esfuerzo cada día para comportarme como su hijo.
No puedo decir "que estás en los cielos" si no estoy guardando tesoros allí.
No puedo decir "santificado sea tu nombre" si no estoy esforzándome para permanecer en santidad.
No puedo decir "venga tu reino" si no estoy haciendo todo lo posible para que se acelere la llegada de ese maravilloso día.
No puedo decir "sea hecha tu voluntad" si estoy desobedeciendo su Palabra.
No puedo decir "como en el cielo así también en la tierra" si no le voy a servir ahora mismo.
No puedo decir "el pan nuestro de cada día, dánoslo hoy" si soy deshonesto o compro cosas en forma ilícita.
No puedo decir "perdónanos nuestras deudas" si guardo rencor contra alguien.
No puedo decir "no nos metas en tentación" si me pongo a propósito a su paso.
No puedo decir "líbranos del mal" si no me pongo toda la armadura de Dios.
No puedo decir "tuyo es el reino" si no le doy al Rey la lealtad que se merece al ser fiel a él.
No puedo atribuirle "el poder" si temo lo que pudieran hacer los hombres.
No puedo atribuirle "la gloria" si sólo estoy buscando mi propia honra.
No puedo decir "por todos los siglos" si el horizonte de mi vida está limitado completamente por las cosas del tiempo.

A medida que nos comprometemos a seguir este modelo para todas nuestras oraciones, todo nuestro caminar cristiano revolucionará. Nunca nos faltará qué decir cuando oramos. Estar a solas con Dios jamás será lo mismo.

Más información
Description

A solas con Dios, debería ser el mayor anhelo de todo cristiano. Sin embargo, muchos de nosotros pasamos muy poco tiempo con él. El autor examina profundamente cada petición del Padrenuestro y nos propone considerar que "la oración es como la respiración" a la que debemos prestar urgente atención. Al estudiar este libro saldremos vigorizados y motivados a pasar más tiempo a solas con Dios.

Qué podemos aprender del Padrenuestro? Todo lo que necesitamos está a nuestra disposición. Primero debemos dar a Dios el lugar que se merece. Luego podemos traerle nuestras necesidades, y él las suplirá por medio de su abastecimiento ilimitado y eterno. Un autor desconocido resume muy bien el impacto de este modelo de oración:

No puedo decir "nuestro" si vivo solamente para mí mismo en un compartimiento espiritual hermético.
No puedo decir "Padre" si no me esfuerzo cada día para comportarme como su hijo.
No puedo decir "que estás en los cielos" si no estoy guardando tesoros allí.
No puedo decir "santificado sea tu nombre" si no estoy esforzándome para permanecer en santidad.
No puedo decir "venga tu reino" si no estoy haciendo todo lo posible para que se acelere la llegada de ese maravilloso día.
No puedo decir "sea hecha tu voluntad" si estoy desobedeciendo su Palabra.
No puedo decir "como en el cielo así también en la tierra" si no le voy a servir ahora mismo.
No puedo decir "el pan nuestro de cada día, dánoslo hoy" si soy deshonesto o compro cosas en forma ilícita.
No puedo decir "perdónanos nuestras deudas" si guardo rencor contra alguien.
No puedo decir "no nos metas en tentación" si me pongo a propósito a su paso.
No puedo decir "líbranos del mal" si no me pongo toda la armadura de Dios.
No puedo decir "tuyo es el reino" si no le doy al Rey la lealtad que se merece al ser fiel a él.
No puedo atribuirle "el poder" si temo lo que pudieran hacer los hombres.
No puedo atribuirle "la gloria" si sólo estoy buscando mi propia honra.
No puedo decir "por todos los siglos" si el horizonte de mi vida está limitado completamente por las cosas del tiempo.

A medida que nos comprometemos a seguir este modelo para todas nuestras oraciones, todo nuestro caminar cristiano revolucionará. Nunca nos faltará qué decir cuando oramos. Estar a solas con Dios jamás será lo mismo.

Escribir Su propia reseña
Estás revisando:A Solas Con Dios Edicion Bolsillo - John Macarthur
Su valoración